Camarones

Mira que los camarones son sosos en este país. Pues da igual, primera cita con una tía y de seguro pide camarones para la cena. Claro, esto solo ocurre si ella es dominicana y tu español. Y si ella no pide los jodidos camarones pues vas tú y se los ofreces: 'te apetecen unos camarones con una botellita de vino?' Y es que ella querrá privar en “fisna” y tú en generoso.

Ningún otro plato ha hecho tanto por el amor inter culturas como el camarón. El moderno conquistador español no se abre ya paso con la cruz y la espada sino, platazo de camarones en mano, trata de conquistar los corazones de caribeñas doncellas ignorante de que no son tales, y que aquellas que piden esta delicatesen  en su primera cita suelen estar acostumbradas a introducirse en la boca 'peces' de mayores dimensiones.

Yo, personalmente, me he jartado de pagar camarones de gratis. Y en ocasiones no solo al proyecto de conquista sino a la hermana y la prima con que aquella nos ameniza la velada. “Es q yo nunca salgo sola con un hombre en la primera cita” nos dirá la descarada para justificar que la hermana y la prima se apunten a la camaronada.

Pero cuando llega el momento (normalmente bastantes semanas después si continuamos de pendejos) de ir a la deseada cabaña (o un resort porque la colega, que vive en los alcarrizos, nos hace creer que ella no frecuenta cabañas) si que va sola. O sea q para comer camarones te llevas las amigas pero para follar conmigo vas sola. Y no podría ser al revés? Que como buen español estoy convencido que saldrán igual de satisfechas de la cabaña que como salieron de satisfechas con las 12 libras de camarones q se cenaron el ultimo día.  Y es que la jodida prima se llevo 6 libras de camarones (parece que “calcularon mal” y pidieron de mas) para su casa en un plato higiénico que pidió al camarero. Y de esta guisa tiene q verse el españolito en su intento de emular  al capitán Alonso de Ojeda (famoso  por conquistar el corazón de la bella y promiscua Anacaona): acompañado de una linda morena con sus dos gordas y aprovechadas primas y una puta bolsa de plástico con los camarones q “sobraron” que te dejan un “bajo” en el coche que te cagas.

Pero, afortunadamente, tras par de años de andar haciendo el canelo por tierras capitaleñas y punta canianas el inocente español aprende la lección, se junta con tigueres de barrio, estudia el comportamiento social de la hembra caribeña y, cual Ave Fénix, resurge fortalecido de sus propias cenizas. Y es cuando aparece el verdadero conquistador inescrupuloso capaz de usar los más viles trucos con tal de lograr sus objetivos.

A cenar a un mexicano y cambiamos el vino por cerveza y la copita de licor italiano por tequila a lo foker. Y de ahí a una cabaña “para poder hablar más tranquilos cariño, no va a pasar nada, yo soy un hombre respetuoso como quedan pocos, pero tomate otro tequilita anda, q estas muy tensa...” Y luego a triunfar porque eso sí, otra cosa los españoles no sabremos pero a follar nadie nos gana, juajuajua que me parto. Anda que no se ríen de nosotros ni nada las dominicanas… Pero eso sí, las tratamos de maravilla y eso les encanta. Claro también les gusta que les traten 'duro' así q en ocasiones suele generarse una disyuntiva entre sus corazones y la parte baja de sus anatomías.

No es mi caso, por supuesto, que soy un amante completo y satisfactorio. Debe de ser porque soy vasco.